Al regresar, sano y salvo, Odilio exclamó: _¡Volvió el trueque!¡Pagué la nalga y me costó un huevo!
Mi nieto, con la panza hinchada y tomándose la boca del estómago, solo pudo emitirme tres palabras: _¡Voy al baño!.
En ese entonces, entendí que sensaciones hay muchas y algunas muy horrendas , como, la de inflación; la de no llegar al baño o, a fin de mes.Cuando Odilio abandonó el aposento, agitando un fósforo a los cuatro vientos, le pregunté: _¿No le compraste al camión de "Carne para todos"?
_ Lo agarré en una esquina pero cuando le estaba pagando, cortó el semáforo. Lo corrí tres cuadras pero no pude alcanzarlo.
_¡Me niego a creer lo que me decís, querido!-dije ofuscada-¡Acá están dando las nuevas cifras del INDEC y son una maravilla!
_ ¿Gracias a la nueva ley de medios aumentaron los programas de ficción, no?- Preguntó sin esperar respuestas.
Me quedé callada y abrí los ojos como si fueran a escaparse de mi cara; apagué la tele, la radio y todo lo que me decía que hacer o que opinar. En definitiva, me despojé de los medios para estar en mi medio y poder pensar.
Besos, Clarisa Larisa.
Clarisa y los medios extremos by Leandro Lloveras is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
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2 comentarios:
ES LA MATRIX, VIEJO. SI NO PODEMOS PENSAR POR FUERA DE ELLA, ESTAMOS FRITOS....
Juan Pablo.
¡CLARISA PRESIDENTE!!!!!
Mariela D.
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